ZETLB
Peter Griffin sacó de mi memoria más profunda recuerdos que, de otra manera, jamás hubieran aparecido. En uno de esos viajes que uno se hace de joven con la inocente –y completamente errónea- intención de aprender inglés en tres semanas, los dueños de la casa en la que vivía se empeñaban en ayudar poniendo series antiguas en su fantástico video Sony Betamax. Una de esas series era protagonizada por un conductor de autobús y su mujer. Su humor machista hoy sería considerado de mal gusto (o quizá no a juzgar por las audiencias de Escenas de Matrimonio). En uno de los “gags” más repetidos, el autobusero cada vez que su mujer se le subía a la chepa, acababa fantaseando que cualquier día le atizaba en los morros a su señora al tiempo que decía:
“Pow, right in the kisser”, que en una traducción más o menos libre sería
“Zas, en toda la boca”Muchos años después, Peter Griffin repetía ante su cuñado la famosa frase. Desgraciadamente para el hermano de Lois, su experiencia con el
“Zas, en toda la boca” le causó un trauma en su niñez, pero eso es otro tema que lo podemos dejar para mejor momento.
La frase ha pasado hoy al repertorio popular con la sana intención de restregarle a alguien en la cara una opinión equivocada. Actualmente opinar se está convirtiendo en un deporte de extremo riesgo. Cualquier opinión, por informada y razonable que pueda ser, se arriesga a ser rebatida por todo un
“zas” a la menor ocasión.
Un gol de
Marco Rubén o una asistencia de
Aitor, son oportunidades magníficas para que los que han mantenido que estos jugadores no dan el nivel para jugar en primera división, sean aseteados con
ZETLB de todos los colores. De poco vale, que uno se alegre tanto de esos goles o asistencias como los defensores de dichos jugadores, da igual, lo importante es el
“zas”. Es completamente irrelevante que en varias horas que llevamos ya jugadas en esta liga, uno, de profesión delantero, haya creado menos de una ocasión de gol por cada 5 horas de fútbol, y el otro, de profesión carrilero, haya metido tres balones buenos. Lo importante es el momento presente y si ese coincide con ese gol o esa asistencia, y os coge en el lado equivocado de la opinión, poneros el traje de buzo, porque seguro que diluvia.
Pero claro, que tire la primera piedra el que esté libre de pecado. ¿Quién no ha disfrutado de dar el
ZETLB cuando ha tenido la oportunidad? En mi caso reconozco que he pecado, y no sólo eso, sino que tengo algunos en cartera que me encantaría regalar –y otros que ojalá no sucedan nunca.
Eso sí, tampoco está de más que cada cual haga ejercicio de memoria para reconocer que determinados
“zas” son totalmente merecidos. Somos bastantes los que creíamos que
Javi Guerrero no daba físicamente para más; pues sí que ha dado, al menos lo suficiente para que sea de las pocas luces que el Recreativo aún posee. El caso de
Ersen Martin es todo lo contrario, creíamos bastantes que iba a ser clave y que se iba a controlar más. No ha sido así, sigue con los mismos impulsos autodestructivos y, lo que es peor, no parece tener propósito de enmienda. Esperemos que este
“zas” sea reversible.
En cualquier caso, todo estos ejemplos quedarían en juegos de niños si algún día se diera la
“el mayor ZETLB jamás contado por un recreativista”: un
hat-trick de
Joselito. Ojalá.